MI SOMBRA SE VOLVIÓ A MIRARME

 




Mi sombra infeliz modelada por distorsiones,

se adhiere a mí con guillotina de pegamento

por las carreteras oscuras de los submarinos,

tan limpia y austera por las luces largas

del helado marchito,

cincelada por obra del tiempo y mi acervo,

inmune a toda caída, siempre dependiente,

no tiene nada que hacer pero se volvió a mirarme

en un desastre de líneas negras,

haciéndome añicos en lo más interior

con miedo a verse en otro tiempo.

Hija de mi altura pero apreciada por distintas magnitudes,

su nombre es Jones y su misión es secreta, 

lista para relevarme hacia la inmersión final,

llevándose de mí todo aquel tiempo tan hermoso.







No hay comentarios:

Publicar un comentario