Matador de Abrigos



Muerta la sombra una campana lleva nombre de fusil
se abre un cuerno de melancolía quebrando el espejo
filtro del guisante erizado como una catedral masticada
ralladita sobre el tibio bosque del payaso
desquiciado a ritmo de maracas y recuerdos de cacahuete
con el césped recién cortado cerró para siempre la quiniela en su caverna
sus ahorros ducados y ejemplar gasolinera
con un estruendo mutilado el matador de abrigos
dibujó sobre su cama un caballo atado a la nada.













CLUB MORGUE




Lanzo un zapato 
su bala en el oído
hierba hecha kung fu
el esqueleto de la sandia
sus pañales ancestrales
fracturan la comba
y el club morgue 
abre su pizzeria
vende muñecas rotas 
al embajador 
con su muleta de arroz
en plena práctica de tiro
con sus hijos.