Cuando tenga edad para salir
la Movida llegará a su fin
y te hablaré de la tormenta
y sus cópulas secretas
con el Diablo persiguiéndome bajo la lluvia
y una flor canela de esparto
rezando su lista de deseos
en el cementerio de la nuca
busto de sangre y pantera rosa
con su pálida coloratura
metida en el bolso.
El mundo es mío,
huele a tomate en el comedor escolar
flotando entre ollas
y papel higiénico
con labios de altos rascacielos.
Sólo tiene catorce años de vino
y una voz cayendo en caracoles
iluminando como un relámpago de tigre
la inmensa máscara
ahora multiplicada.