A TU LADO


Yo soy quien escudriña la noche del lobo,
quien te muerde la nuca en la niebla
y ataranta tu acuática calavera.
Yo, he estrellado mi nave blanca,
quedando atrapado, enmarañado
dentro de las redes de tu astral telaraña,
pegado al timón del Dios suicidado.
Yo demente, glauco,
eternamente a tu lado.