CHOTIS



El recuerdo de los besos marchitos en el pantalón
la polla huyendo por las baldosas
crucé el pasillo y la mujer rubia sin rostro me lanzó su serpiente
posición individual de la muerte
pero finalmente me besó
de manera trascendental
como persona única retocada en el vientre de Dios
sin cara, hundida sin edificio ni efigie
y yo tarareaba; ...una morena y una rubia
de alfombras hechas del betún
con tus arrugas la memoria
que no me engañas Belcebú...
El chotis siniestro dio paso al bosque
al impresionismo de Ravel
en aquel árbol donde me consagré a Emma
y con su mirada de ángel
cristalicé un girasol caído del cielo.


Árbol y Río al Atardecer (2020) {Foto; Cristián Sandre}


No hay comentarios:

Publicar un comentario