OTROS VERANOS

 


No soporto el destello de la serpiente

en la urdimbre de una mujer de mármol 

porque en ella no crece la rosa al acariciar su seno

ni se restriegan los astros en mis dedos 

como en aquellas noches iluminadas con tu sombra 

cuando los dos éramos jóvenes

y pensábamos que habría otros veranos.

 















ENTIENDO

 


Entiendo

que no me entiendes ni te entiendo 

aquí en el fondo de las cuevas 

donde los penaltis de fresa

son olas de luz en mi pensamiento 

y el jaguar es petróleo

clavándose en las frondas oscuras

como un arpón de ceniza

más allá de una tenue luz dormida 

en medio de un solitario bosque 

porque sólo allí te entiendo 

donde es posible recuperar el verdor

la cascada que nutre la flor 

y nos impulsa a renacer de nuevo

para recuperar un tiempo 

que debió ser nuestro.
















MIENTRAS NOS DURE EL VERANO

 





La cabeza me pesa 

porque llevo la luna pegada en el párpado 

y los perros vagan por mi alma

colgándose de los columpios

bebiendo el silencio de la estatua

y si me tocas te quedarás pegada a mí

como una mariposa adherida

al frescor de los verdores

compartiendo el destino de mi agua

aquel pasado entrelazado y perdido 

preñado de besos verdes y frescos

en cada gota de este renacer

mientras nos dure el verano.











TE BUSCO

 


No sé quién eres,

pero apareces entre viejas sombras de melancolía,

moviéndote como un castillo misterioso

colocado en un camión.

Cociné unos dados a fuego lento, 

perdiendo el perfume de los tiempos

y me eché a la vida 

saliendo por las noches 

para ver si tropezaba contigo.

Hasta que un sábado de Julio,

sentí que tú cuerpo estaba en una bolsa,

en cada copa de árbol

donde duermen los enamorados.
















AUSENTE

 


Sonrío porque tú sonríes también 

y no puedes leer las palabras que no digo 

pero llevo ausente mucho tiempo

apoyando la cabeza en otra nube 

moviéndome por lejanos parajes 

mientras estoy contigo.













EL CIRCO

 


Me engañó el espejo 

pues mi dedo es la trompa de un elefante 

llena de pelos metida en una caja 

por todo el daño que me has hecho 

en este grotesco circo donde me exhibo

con juegos silenciosos y prohibidos

antes de que salga el payaso 

y la gente empiece a reír

porque el espectáculo debe continuar

y la mariposa sangrar estremecida 

abriéndose al mar. 















RESPLANDECER

 

La vieja sombra sedaba la ciudad 

cuando un gran sol vino de fiesta 

con su boca tierna y su peluca quemada 

como una mancha de luz en un portal oscuro

y la vi resplandecer 

dura como el agua que muere adentro

como si cada ola pudiera ser la última  

y me salpicase refrescando mi vida

sintiendo por unos instantes

la piel de un dios.















JARRA DE LOS SUEÑOS

 


En un rincón del huerto 

hay una jarra de los sueños

con la que refresco mi garganta 

y las mariposas alivian y tensan mis cuerdas 

haciéndome verde y misterioso

para ser un barco en un camino de espejos

hasta hallar el lugar donde enterrar mis huesos.