NAVEGANTE

 


Cuando el viento sopla,

echo al mar mis labios 

y todos los poemas se convierten en peces.

Soy un navegante desconocido

y mi faro es un árbol sin raíces,

perdido en la noche tórrida

frente a la estrella.

Estoy tranquilo,

renaciendo en cada rayo 

de esta brisa fresca,

aún sabiendo que tu silla vacía 

arde en las entrañas de un volcán.













HACIENDO UN NUDO

 


Es el tiempo del verano

pero tu carne está lejos y encendida

mientras los sueños se derrumban

entre las mesas del colegio

yo voy corriendo hacia la luz

sobre una ola 

haciendo un nudo 

hasta nacerte.
















HURACÁN

 

Escucho

el gotear de los grifos

bajo las llamas del vino que llueve 

y la luz del relámpago 

desvelando tu esqueleto.

Estás muy cerca,

puedo sentirlo,

ahora que vuelvo a ser niño 

y el verano despliega su reino.

Pero, por favor, date prisa

o nuestras sombras se irán 

como se fueron las mariposas 

tras el último huracán.












TAMBORES

 


El helado respira lleno de voz

en el abanico de la nuca

y aunque el cielo de verano es limpio 

escucho el chillido del autómata

en un frasco líquido.

No invoco a las ninfas 

y sé que me esperabais en casa 

arrojado a las bestias 

pero soy un lobo bajo la lluvia 

y he rallado los sombreros hasta hacer humaredas.

En la noche hay tambores 

y ella está al final del laberinto

como una torre silenciosa

que sueña con el mar.















LA TRAVESÍA ES UN TRAVESTI

 


La travesía es un travesti 

que te golpea sobre un tambor 

hasta convertir la ternura en ternera

los barrotes en legumbres

y la voz cremosa de Emma

en dos hemisferios verdes

donde el viento y el ajedrez

han aprendido su oficio

y las hélices me salpican 

la vida a borbotones.















ELECTRICISTA DEL RÍO

 


En las orillas del río cayó una estrella

como un objeto perdido

como la hierba de un ángel capturado

que se deshace en el aire 

brizna a brizna

chispa a chispa 

en el ardiente fulgor de su luz

y como electricista debo reparar

el corazón de la estrella

la empalizada rota

en el cabello Emma

para que ningún barco se estrelle

contra la orilla del río 

y su luz me ilumine

caminando entre tinieblas.
















Cabalgué Mi Vaso En Un Rayo

 


Volaron mariposas en sentido contrario

del que yo volaba mi cometa 

entre los mármoles partidos

de un bar con mugrientas escaleras 

y pedazos de semáforos destruidos 

donde yo estudiaba oposiciones a alfombra

y hacía el amor con paraguas

resguardándome de tu flujo de lágrimas 

esperando un verano y un taxi en la espuma de la cima

y en lontananza atisbé una lejana polvareda

un portazo rompiendo las olas

cuando cabalgué mi vaso en un rayo

hasta besarte.














MADI

 


La cálida luz se extinguirá desde la orilla

porque el verano no dura eternamente

y tu hermosa cabeza encendida 

sobre las ramas del álamo

es un ciervo tan dulce y ardiente 

respirando hondamente 

como el tejido de un velo transparente 

que se eleva y desciende regresando a mi vida 

porque has retornado entre flores colgantes 

y pronuncio tu nombre 

MADI MADI MADI

líbrame de las tres mujeres 

que en la noche oscura profanan su canto

libérame de Emma y su red dorada 

que me impulsa hacia la nada

porque nunca ha respondido a mi deseo

en el oro de la pared 

cuando tú sembraste mi campo

y recogiste la mies de los días placenteros

los únicos que tuve con tu celeste huella

y desde entonces camino como un perro perdido 

invocándote en el calor del día 

y bajo el trueno te digo

MADI ven ahora con tus manos llenas de flores

para trocar nuestro invierno en verano

porque ostentas el poder 

porque tú eres la andaluza que cruza

mojando sus quesitos en la fuente susurrante

con mi corazón palpitante en tu lecho de hojas

tú tañes un arpa divina cuya música jamás termina 

y el bosque nos espera 

para que esparzas tu dorado polen en las brumas de plata 

donde las mariposas descansan su limpia frescura 

porque el largo invierno ha terminado

en la hierba donde saldré a recibirte.

















ESTÍO ETERNO

 


Tres mujeres

encontré en medio del sendero 

las sienes conversaban en la sombra 

elucubrando su conspiración 

para atraerte y enredarte

en la noche fresca

pero sólo una puede elegirme 

y hacer liviana mi existencia 

esparciendo polen por las rutas sin fin 

a la espera del amor

y aunque no tengo tiempo para amar

ni sé lo que es ser amado

podría intentarlo por ti 

saliendo del nido tras la puerta

fingiendo que existe un estío eterno.